El 4 de junio, los sindicatos independientes de Hong Kong, organizados en la Confederación de Sindicatos de Hong Kong (HKCTU), conmemoran anualmente la masacre de la plaza de Tiananmén [1]de 1989 que aplastó al movimiento por la democracia y los primeros movimientos de las organizaciones de trabajadoras y trabajadores independientes. Este año piden que se ponga fin a la continua represión de las organizaciones y protestas de los trabajadores y trabajadoras.
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Las autoridades oficiales están cada vez más agresivas a medida que las trabajadoras y los trabajadores chinos presionan por sus demandas a través de la huelga y organización. Se arresta y detiene a trabajadores y trabajadoras en huelga y activistas; las organizaciones de apoyo laboral se han visto obligadas a cerrar; y la nueva legislación sobre ONGs y seguridad nacional podría restringir aún más la libertad de asociación.
Durante la huelga masiva del año pasado de miles de trabajadores y trabajadoras que reclamaban sus derechos a seguridad social en Yue Yuen en el sur de China, principal fabricante de calzado del mundo que produce para Nike y Adidas, hubo trabajadoras y trabajadores golpeados y detenidos
Este año HKCTU emitió una Declaración del 4 de junio [3] (en inglés) pidiendo al gobierno chino que libere a todos los activistas sindicales encarcelados; que ponga fin a la represión y la violencia contra activistas y representantes obreros; que ratifique y aplique los convenios 87 y 98 de la OIT, y dé a los trabajadores y trabajadoras el derecho legal a formar sindicatos, hacer huelga y negociar las condiciones laborales; y abandone las restricciones sobre los defensores de los derechos de los trabajadores que reciben apoyo internacional.
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