Honduras: honrar el legado y la vida de Berta Cáceres

Hace cuatro años, el 3 de marzo de 2016, la activista y defensora de derechos Berta Cáceres fue asesinada por su papel en la movilización contra una represa propuesta en el río Gualcarque que amenazaba las tierras y los medios de vida de los indígenas lencas. En noviembre de 2018, 7 de los 8 sicarios acusados fueron condenados por el delito y condenados a prisión. Los empresarios que los mandaron, organizaron y financiaron el asesinato aún no han sido procesados a pesar de las abundantes pruebas de su participación.

Para honrar su vida y su legado, y para destacar la lucha en marcha para llevar ante la justicia a los responsables de su asesinato, la Regional Latinoamericana de la UITA, Rel-UITA, junto con el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) del que Cáceres fue cofundadora, la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y la Fundación Friedrich Ebert organizaron una  exposición fotográfica y otras actividades públicas para los días 2 y 3 de marzo en Intibucá.

La impunidad es lo que apuntala la violencia y la corrupción sistémicas desatadas por el golpe de estado de 2009 respaldado por Estados Unidos. La causa judicial contra el entonces jefe de la empresa hondureña de represas DESA, preso y acusado como "autor intelectual" del asesinato hace dos años, se evaporará si no lo llevan pronto a juicio. Otros ejecutivos de empresas, junto con militares, policías y funcionarios de seguridad que organizaron el asesinato, permanecen intactos.

El gobierno votó para poner fin al mandato de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), cuestionando el futuro de la Unidad Fiscal Especial contra la Impunidad de la Corrupción (UFECIC) del Fiscal General. La cooperación entre ambas había realizado investigaciones que exponen la red de complicidad en la corrupción de alto nivel y el robo de fondos públicos.

En este contexto, el 21 de febrero, la Secretaría Regional Latinoamericana de la UITA, Rel-UITA, escribió una carta a la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet en la cual insta a la OACNUDH a mantener una fuerte presencia en Honduras. Durante la última década, la Rel-UITA y las afiliadas de la UITA en Honduras han sido un pilar de apoyo en la defensa de diversos derechos humanos bajo ataque desde el golpe.